Sonríe cada día

Sonríe cada día

jueves, 3 de mayo de 2018

3.1. DEBATE

Tras la lectura de los dos artículos la primera reflexión que puedo compartir es que todos somos personas únicas e irrepetibles. Evidentemente las personas con TEA poseen unas características idiosincrásicas que debemos tener en cuenta en nuestra labor como docentes, pero sin olvidar que son niños y niñas que tienen unos intereses tan lícitos y respetables como los de cualquier otro niño o niña. 

Ambos artículos, "Una respuesta para Juan" (Arbea y Tamarit, 1999) y "Modelos educativos para una escuela de calidad" (Tamarit, 2005), me han resultado muy interesantes, tanto por su sencillez como por su practicidad. Pero me gustaría hacer especial hincapié en un par de ideas que me parecen básicas y que deberíamos tener en la mente diariamente. Por un lado, el primer artículo nos habla de la creciente idea en el ámbito científico de que el conocimiento es una construcción social por lo que la inteligencia dependerá de la comprensión y de la regulación del medio social. Y por otro lado, en el segundo artículo nos recuerda a los profesionales que, en nuestro caso, los colegios son un hogar (habla de residenciales pero lo podemos extrapolar a las escuelas) y eso está por encima de todo y que en un segundo plano debería estar para nosotros la idea de puesto laboral. 
La idea de abordar el currículo escolar de una manera más funcional para este tipo de alumnado resulta complicado y en ocasiones, lleva a los docentes a una enorme frustración. Son numerosos los items recogidos por la ley que se consideran indispensables para el desarrollo personal. Sin embargo, ¿son acordes a la realidad de este alumnado?

Entre mis aportaciones como posibles lecturas o materiales que en mi caso me han servido para mi práctica docente se encuentran, entre otros, los siguientes: 
  • El programa AITTEA: es un programa muy completo de dominio público que ofrece el abordaje de la programación curricular desde una visión más centrada en el Trastorno del Espectro Autista. 

  • Diseño Universal para el Aprendizaje, porque todos somos todos: es un enfoque que está cogiendo una gran fuerza en el ámbito de la inclusión y que consiste en la flexibilización del currículo y de esta manera hacerlo flexible y accesible a todo el alumnado sin excepciones. 

  • Hortal, C., Bravo, A., Mitjá, S., Soler, J.M. (2011). Alumnado con trastorno del espectro autista. Barcelona: Graó. 

  • Martos, J., Llorente, M., González, A., Ayuda, R., Freire, S. (2012). Los niños pequeños con autismo. Soluciones prácticas para problemas cotidianos. Madrid: CEPE. 
  • Martos, J., Llorente, M. (2017). El niño al que se le olvidó cómo mirar. Madrid: La esfera de los libros. 


El entorno escolar debe estar formado por un alumnado lo más rico posible, donde las diferencias sólo sumen y ayuden a entender mejor la complejidad del mundo. Sin embargo, sin la solidaridad y la comprensión por parte de toda la comunidad educativa, la inclusión de este alumnado en centros educativos resulta una tarea complicada. Complicada... ¡Pero nunca imposible! 

No hay comentarios:

Publicar un comentario