Sonríe cada día

Sonríe cada día

martes, 24 de abril de 2018

2.3. FAMILIAS: CONTRATO

El contrato o como a nosotros nos gusta llamarlo, "¿trato hecho?" suele ser efectivo en nuestro día a día. Procuramos hacer uso de los refuerzos positivos pero los premios en muchas ocasiones son el refuerzo más inmediato y comprensible. Por ello, procuramos siempre tenerlos a la vista. En la siguiente infografía, realizada con el programa Piktochart, podemos ver cómo utilizamos los premios.

Dependiendo de las características de cada alumno, los premios son conseguidos con más o menos actividades. Y lógicamente, dependiendo del trabajo o conducta deseada, así será el premio conseguido. Para hacernos una idea de cómo lo hacemos en nuestro aula TEA y en las respectivas aulas de referencia, a continuación podéis ver una agenda, con las distintas rutinas a realizar y una imagen pegada en la mesa donde ponemos la foto del alumno y el premio a conseguir. Es algo muy sencillo pero que nos sirve de gran ayuda para aceptar las distintas actividades escolares y para la adquisición de la rutina diaria.

La agenda que podéis ver en la mesa es viajera y tiene por objetivo, entre otros, que los chicos compartan su día a día en casa. Así que, la familia es un pilar primordial en esta actividad. De la misma manera que en el cole utilizamos el trato hecho, donde el alumno puede elegir el premio deseado, en casa puede y debe ser realizado igualmente. Son conocidos los problemas de generalización por parte de las personas con TEA por lo que resulta de gran ayuda utilizar las mismas estrategias, siempre consensuadas, en el colegio, en casa y en aquellas actividades que asista el alumno en cuestión. 

lunes, 23 de abril de 2018

2.2. CONDUCTAS POSITIVAS

Uno de nuestros objetivos desde el aula TEA es que nuestros alumnos adquieren el mayor grado de autonomía en la dinámica escolar. La mayoría de tutores y maestros que trabajan con alumnado con TEA nos trasladan su gran preocupación porque no pueden ofrecer el tiempo y la atención que les gustaría. Así que, una de nuestras tareas consiste en enseñar el camino para trabajar de manera autónoma en su aula de referencia.
Para esta actividad, he decidido cambiar un poco el enunciado propuesto por el curso porque busco la mayor funcionalidad para mi trabajo. Así que, las conductas positivas las he centrado en una tarea en concreto: trabajar en clase. Y para ello, debemos seguir unas pautas, unos pasos y cada uno de ellos, puede ser entendido como una conducta positiva dentro de un fin: trabajar solo como el resto de compañeros y compañeras.
He utilizado una nueva aplicación llamada easelly que ofrece muchas plantillas prediseñadas para hacer infografías. En ella podéis ver como tenemos que seguir unos pasos para trabajar, en este caso en concreto, una actividad tipo ficha. 


miércoles, 18 de abril de 2018

2.1. ANÁLISIS DE CONDUCTA


ANÁLISIS DE LA CONDUCTA


CONTEXTO
ANTECEDENTE
CONDUCTA DISRUPTIVA
TOPOGRAFÍA

FUNCIÓN
CONSECUENCIA INMEDIATA
CONSECUENTE
DIFICULTADES ASOCIADAS
El alumno está adscrito al aula TEA pero decidimos todas las personas que trabajamos con él que, debido a que posee una gran capacidad de imitación y que mostraba frustración ante determinadas situaciones del aula TEA, que lo mejor era aumentar las horas de apoyo en su aula de referencia y que permaneciera toda la jornada escolar en este último aula.
En los tiempos donde tenemos juego libre (recreo y tiempo de patio tras el comedor) el alumno muestra en ocasiones resistencia para subir a clase y en el aula conductas desafiantes, llegando en ocasiones a golpear a compañeros y a adultos de referencia. Estas conductas se están generalizando a otros momentos como son Educación Física y Plástica.
Cuando se enfada muestra resistencia, grita, se golpea (sin llegar a ser autolesión), llora e incluso puede llegar a agredir a compañeros y a adultos de referencia (puñetazos y golpes con las manos).
Su objetivo es evitar trabajar y conseguir hacer lo que desea (seguir jugando, coger un cuento, mirar por la ventana).
Cuando subimos, su grupo de recreo suele cogerle de las manos o los brazos para que se suba con ellos. Le pedimos que se tranquilice y le decimos que el recreo ha terminado. Ya en clase, le pedimos que se siente en su sitio y recordamos que ya ha terminado el recreo, que toca trabajar y sacamos los materiales. Si coge un cuento, se lo quitamos y lo dejamos en su sitio. 

Cuando termina el recreo, generalmente se enfada y aparta a los compañeros llegando a golpearlos. Una vez en el aula, nos dice con voces (acompañado a veces de llantos) que no quiere trabajar. Si seguimos con la dinámica acaba agrediendo.
Muestra elevada frustración ante las órdenes. Además, es muy impulsivo y muestra hiperactividad que le dificulta tanto en la atención selectiva como mantenida.


 PLAN DE ACCIÓN

En primer lugar, realizaremos un registro donde anotaremos en qué momentos nuestro alumno golpea a un adulto o a un compañero. De esta manera queremos obtener información por parte de todos los profesores a lo largo de la jornada, puesto que resulta complicado preguntar de manera diaria cómo ha sido el comportamiento del alumno. Para ello, el alumno tendrá una carpeta con su horario semanal y el profesor subrayará de color amarillo si ha agredido a un compañero o de color sora si ha sido a un adulto. En un primer momento queremos saber los tiempos para hacernos una idea y para que sea una recogida de información lo más sencilla posible para el profesorado.

Ejemplo de registro semanal


El alumno no suele presentar problemas para jugar con sus compañeros de clase, siempre que sean actividades de su gusto. En el aula tenemos grupos de recreo para que hagan partícipe a su compañero de las actividades. Sin embargo, a veces se agobia porque son muy protectores así que les pedimos que tengan paciencia con su compañero y que a veces necesita tiempo para estar solo. Así que, intentamos dirigir un poco la interacción cuando vemos que nuestro alumno empieza a mostrar síntomas de enfado. Las subidas al aula se realizarán con un maestro de referencia y, antes de subir, intentaremos que no lo vea como algo negativo, como que todo ha terminado y ahora toca trabajar. Intentaremos que se fije en que todos los compañeros nos tenemos que subir, que ha terminado el recreo y que continuaremos todos juntos nuestro día en clase. Mientras podemos sugerirle que nos cuente lo que ha estado haciendo y, al ser un alumno muy fantasioso, le seguiremos el juego para que no sea un cambio tan drástico.
Por último en el aula, le pediremos que se siente (generalmente ese no es el problema porque le gustan muchísimo los cuentos y verlos sentado) y nos situaremos en la agenda con pictogramas (y/o en el horario de aula adaptado con pictogramas) en el momento que estamos. En nuestro caso, usaremos agenda viajera personal y pondremos un horario de su aula de referencia adaptado con pictogramas para hacer partícipes a todo el alumnado y profesorado.

Horario Aula de referencia adaptado con pictos

Ejemplo de agenda viajera